La planeación educativa debe ser flexible para organizar los aprendizajes de los estudiantes en base a una secuencia didáctica lógica. Se debe considerar los conocimientos y estilos de aprendizaje previos de los estudiantes, así como prever la evaluación de forma anticipada. La planeación se desarrolla en tres momentos: rescate de conocimientos previos, puesta en práctica de estrategias y actividades de aprendizaje, y acomodación del nuevo conocimiento.